Si hay un sabor que hace que los quiteños y los chagras disfruten en cualquier momento del año, es el sabor de las reconocidas “Quesadillas de San Juan” que desde 1935 endulzan los paladares de todos quienes las saborean y que de seguro desconocen su tradicional historia.
Manuela Cobo es su gerente y propietaria, quien recuerda como su abuelo comenzó esta tradición en popular sector de La Ronda hasta 1942 cuando pasó a su barrio actual, San Juan.
En un horno de leña se quemaba el eucalipto para darle ese sabor tan particular y que le hace recordar los días en que en una gran batea preparaban el condumio para hacer las quesadillas. Recuerda como su abuelo la sentaba en sus piernas y usaba huevos de campo grande y frescos. De esta manera se ha mantenido una tradicion gastronómica que hoy es parte del patrimonio intangible de la ciudad.