Blanca Casicagua es la 3ra generación de mujeres que en su familia preparan la deliciosa Tripa Mishki. Este es un plato que se consume tradicionalmente en la región sierra y se ha vuelto característico de la ciudad capital. El plato consiste en tripa de vaca condimentada y cocinada sobre carbón.
La receta original la tenía su abuela, María, quien se la heredó a su madre Josefina y luego fue perfeccionada por Blanca. Después de varias reubicaciones en el barrio, ahora vende sus apetecidas Tripas en el parque Navarro. Este parque es más conocido como el parque de las tripas de La Floresta y son pocos capitalinos los que lo llaman por su nombre. La preparación del plato empieza con la selección de las tripas en el Camal Metropolitano, Blanca acude 3 veces por semana para escoger las mejores vísceras de su tendera de confianza, luego las condimenta y es allí donde yace el secreto del sabor. Para asarlas las lleva a su estación de cocina móvil en el parque. Ahí, sobre una cocina de carbón y a plena vista de sus clientes, los deleita primero con el aroma.
El plato se sirve con una ensalada de cebolla, zanahoria y perejil, papas, habas, mote o choclo; las combinaciones quedan a gusto de cada cliente. Doña Blanca también prepara una receta de ají de maní, infaltable compañero de las tripas. El mote que se sirve en su puesto es muy reconocido por su sabor, la misma Doña Blanca lo cocina, desagua y pela con cal, de la misma forma que lo hacía su abuela María. Mediante un proceso de autogestión y perseverancia ha logrado posicionarse como una de las mejores huecas de la ciudad capital.